12/16/2009

AGENDA LEGISLATIVA DE CONSENSO
PRIMER SEMESTRE
AGOSTO – DICIEMBRE 2009


NATURALEZA:

La próxima Asamblea, conforme a las declaraciones realizadas por dirigentes de las bancadas más numerosas, se perfila como un espacio bipolar que enfrentará a los asambleístas del partido de gobierno con una fuerte oposición conformada por Sociedad Patriótica, Partido Socialcristiano y PRIAN. Frente a esta situación es importante analizar la posibilidad de conformar un grupo no alineado que apoye todas las iniciativas positivas, se oponga a las que afecten al sistema democrático o al interés nacional, a la vez que tenga libertad de acción suficiente para fiscalizar los actos de gobierno. El grupo no alineado debería, además, desempeñar un papel de espacio democrático de aproximación, de búsqueda de acuerdos y solución de conflictos que asegure un desempeño eficiente de la legislatura y combata las viejas prácticas que desprestigiaron a las anteriores legislaturas.

OBJETIVOS:

Acatar el mandato del electorado ecuatoriano, expresado en las urnas el pasado 26 de abril, de que la primera Asamblea Nacional sea un espacio autónomo, independiente y democrático; que exprese un equilibrio de poder y contrapeso político a cualquier proyecto dominante;

Garantizar un proceso legislativo democrático, eficiente y concertado de aprobación de leyes fundamentales determinadas en la Disposición Transitoria Primera; y

Asegurar un proceso de fiscalización y control político transparente de temas que merecen atención inmediata del Legislativo.

No dejar en la impunidad los abusos cometidos en la Asamblea Nacional Constituyente y en el Congresillo. ( Analizar las conductas de los asambleístas constituyentes y de los delegados de la CLF, a la vez que presentar reformas a las normas que se hayan aprobado de manera irregular)

ACCIONES:

Pedido a la CLF para que reprograme sus actividades en el último mes de su funcionamiento y se abstenga de aprobar cuatro cuerpos legales que requieren un mayor conocimiento de la ciudadanía y debate profundo, como son:

o Ley Orgánica de la Función Legislativa, para asegurar un proceso legislativo y de fiscalización democrático, autónomo y eficiente;

o Ley Orgánica de Control Constitucional, que garantice la plena vigencia del modelo garantista que establece la nueva Constitución;

o Ley Orgánica de Descentralización y Ordenamiento Territorial, que involucre la participación de los gobiernos seccionales recientemente elegidos y defina un marco democrático e incluyente de organización político administrativa del país;

o Ley Orgánica de Seguridad Nacional que considere los argumentos de las Fuerzas Armadas y se conciba a la seguridad como un objetivo de Estado y no como una herramienta del gobierno de turno.

LEGISLACION

Aprobación, a partir de una amplia información y debate de normativas como:

Ley de Comunicación e Información, que garantice plenamente los derechos a la comunicación e información y las libertades de expresión y conciencia que proclama la Constitución;

Ley Orgánica de Educación, que ponga las bases del cambio profundo de las estructuras educativas del país y apunte a asegurar 15 años de educación de calidad para todos los niños, niñas y adolescentes;

Ley de Promoción del Empleo y Producción, que permita al país responder creativamente a los efectos de la crisis económica internacional, fortalezca la dolarización y abra oportunidades de trabajo e inclusión a amplios sectores sociales que hoy afrontan la dura realidad del desempleo y subempleo.

Derogatoria de la reforma penal que favorece a los delincuentes dictada por el Congresillo, salvando las normas que aseguran la oralidad penal, la protección de las víctimas de delitos sexuales, la fijación de indemnizaciones sin recurrir a juicios civiles, entre las fundamentales.

Ley reformatoria al Código Penal que tipifique nuevos delitos, ofrezca garantías a favor de las víctimas de la delincuencia, sancione ejemplarmente el asesinato de miembros de la fuerza pública y se constituya en un cuerpo normativo protector de la ciudadanía y no de la delincuencia.

Reforma constitucional que introduzca una auténtica y real “muerte cruzada” para evitar que la independencia del Parlamento sea socavada por la amenaza permanente de su disolución que elimina a la Asamblea y deja en funciones indefinidamente al Primer Mandatario.

FISCALIZACION

Desarrollo de una agenda de fiscalización que, de manera transparente, determine la legalidad y posibles perjuicios contra el Estado en temas como: asignación a dedo de miles de millones de dólares en obras públicas; incremento del gasto corriente; y, las denuncias en contra del hermano del Presidente de la República.

Fiscalización a la Asamblea Nacional Constituyente y al Congresillo en materias como contratación de obras, servicios y adecuaciones; pago de “liquidaciones” a los ex asambleístas constituyentes; compra de teléfonos celulares y pago de uso de esos teléfonos a favor de los miembros del Congresillo; adquisición de vehículos y destrucción de uno de ellos; egresos en viajes internacionales y viáticos, entre otros.

Es importante que la transparencia de las actividades de cada asambleísta asegure una relación limpia y transparente, por esa razón dejo planteadas las bases de mi conducta en el desempeño de la representación de mis electores.
BASES PARA LA GESTION PARLAMENTARIA.

En la actual situación del país, es una tarea compleja difícil, pero estimulante el llevar una representación seria, digna y patriótica de los electores con el propósito de trabajar por una sociedad libre, justa, equitativa y democrática; de ser posible, con el consenso de los diversos sectores políticos y de la sociedad.

Por esa razón mi compromiso es participar en la próxima Asamblea buscando estrictamente el mayor bien para todos los ecuatorian@s, con independencia crítica frente a la acción del gobierno y de otros sectores parlamentarios, apoyando toda iniciativa que en mi más patriótico entender sea buena para la sociedad en su conjunto, pero especialmente para los sectores desprotegidos.

Convencido de la importancia de la participación de la sociedad civil plantearé a ciudadanos patriotas, honestos y especializados en las distintas áreas de la acción pública, constituir un grupo de apoyo a mi participación en la legislatura, además que abriré por medios virtuales y tradicionales las oportunidades de contacto con la población para escuchar sus inquietudes y poder representar mejor sus intereses.

Mi compromiso Ideológico:

1. El Estado

Defenderé un Estado nacional soberano, democrático, que asegure la libertad y la dignidad de las personas, su desarrollo personal y colectivo, material y espiritual, con garantías para el ejercicio de una ciudadanía activa y participativa; un Estado Social de Derechos, fundamentado en el poder ciudadano y en el reconocimiento de nuestra realidad multicultural y diversa; en la democracia como un sistema que asegura la participación política y que hace posible que la ciudadanía ejerza influencia y tome parte en las decisiones políticas. Aspiro a incidir fuertemente en la defensa de los principios de pluralidad, diversidad, equidad, tolerancia, libertad e igualdad.

2. La sociedad ecuatoriana

Es importante contribuir a la creación de un orden social justo, que asegure la libertad de conciencia, de cultos y expresión, el derecho a la intimidad, a la privacidad, a la igualdad de oportunidades y a la calidad de vida. Su antitesis es la intolerancia que debe combatirse en cualquiera de sus expresiones. Lucharé por ser parte de una Asamblea y una sociedad que garanticen la convivencia respetuosa y pacífica; la efectiva defensa de la igualdad, la libertad y la dignidad; un desarrollo económico que permita un mínimo de bienestar para todas las personas, cuidando la conservación y mejoramiento del ambiente y que haga de la palabra la herramienta fundamental de la creación de una cultura de paz.

3. La organización territorial

Creo firmemente y como municipalista defenderé la descentralización y las autonomías, para la realización de un proyecto nacional integrador que asegure una mayor cohesión nacional y la articulación entre lo político, económico, social, urbano, ecológico y cultural.
Es indispensable defender la subsidiaridad como principio de buen gobierno, esto es la complementariedad y cooperación respetuosa de los distintos niveles de gestión para que exista un sistema armónico, sin conflictos de autoridad y con los pesos y contrapesos territoriales que evitan el centralismo y sus males.

4. La construcción de ciudadanía

No se debe confundir un Estado fuerte con un gobierno fuerte. El estado fuerte implica una ciudadanía formada, con conciencia política, actuante, informada y responsable. Por lo tanto propondré y apoyaré proyectos que aseguren la construcción de ciudadanía.

5. La Información

Los medios de comunicación son agentes activos en la construcción de la opinión pública y, por lo tanto de identidades, autoestima y sentido de pertenencia. En un mundo global que tiende a avasallar a las particularidades culturales, su papel en ese sentido debe ser reconocido. Es vital para el país la posibilidad de que las personas tengan acceso a medios plurales, laicos y democráticos y que éstos asuman su responsabilidad social, jurídica, educativa y política coherentes con el interés de la sociedad. Se debe velar por su democratización, regulación y vigilancia social así como por la visión objetiva, profesional y ética de los informadores. La ciudadanía debe participar y ejercer con responsabilidad el derecho a la información.

6. El sistema político

En la actualidad existe un déficit de política y de democracia que debe ser superado. Se debe trabajar desde la legislatura para recuperar las instituciones básicas del quehacer político, prestigiar a la participación en política y reivindicarla como la tarea de los mejor preparados, más justos y buenos ciudadanos. Hay que demostrar que la ética debe ser sustento de la política y que participar en la vida pública no implica inevitablemente corrupción e ineficacia. Contribuiré desde mi curul a entender la política como la expresión superior de la ciudadanía para manifestar ideas, para enarbolar propuestas y para construir un proyecto nacional viable.

7. El Desarrollo Económico

El desarrollo económico sólo tiene importancia en la medida que genera mejores y más justos niveles de vida para la población. No es un fin en si mismo, sino un medio para alcanzar equitativamente el bienestar físico y espiritual de las presentes y futuras generaciones. Para que el crecimiento se convierta en verdadero desarrollo económico y social es necesario un reparto justo y equitativo de la riqueza.

En este contexto, se debe defender una economía de mercado con diversas formas de propiedad y orientada por un gobierno democrático que garantice el interés público y la soberanía nacional, que funcione bien y haga frente a las ineficacias, ineficiencias y a la corrupción. El patrón de desarrollo debe caracterizarse fundamentarse en las capacidades productivas internas, buscando abatir los desequilibrios sectoriales y regionales, así como las desigualdades sociales.

El estado debe conducir la economía de mercado con responsabilidad social, y participación de los sectores público – privado para subsanar las fallas y desequilibrios estructurales del mercado.

En este sentido, el estado debe ser conductor, regulador y promotor de la economía hacia objetivos fundamentales del país como el pleno empleo, el crecimiento sostenido y sustentable, la distribución equitativa de la riqueza, la calidad de vida y la defensa de la soberanía.

Debe merecer atención primaria del estado, desarrollar equitativamente la infraestructura y la tecnología; la educación productiva y la organización del trabajo, el financiamiento y vinculación de los mercados, con una amplia participación de los diversos agentes económicos.

8. Compromiso ambiental

Es deber de la legislatura legislar para el cuidado, la conservación y el mejoramiento del medio ambiente; estimular el desarrollo sostenible y sustentable que supone el resguardo de los recursos naturales y el mejoramiento del ambiente, así como el acceso equitativo a los recursos naturales, preservándoles para el aprovechamiento de las futuras generaciones. El compromiso ambiental debe nacer de la propia sociedad y ser política firme de las instituciones públicas y privadas. Todos los niveles de gobierno deben diseñar y ejecutar estrategias frente al cambio climático y el calentamiento global.

9. Seguridad Alimentaria

Es obligación del estado garantizar la seguridad alimentaria de la población como un derecho humano fundamental. Promover el derecho a la alimentación debe inscribirse como una prioridad de los ejes políticos, económicos y sociales de la nación. La seguridad alimentaria implica asegurar a toda la población una nutrición de calidad basada en el patrimonio cultural alimentario del país.

10. La calidad de vida

Hay que trabajar para que toda la población pueda gozar de una vida de calidad, con derecho al empleo digno, a la seguridad social y económica, a la educación, alimentación, salud, a la tierra, a la independencia, a la libertad, a la diferencia, a la justicia y al tiempo libre. Debe promoverse toda acción para acabar con las profundas, complejas y dolorosas desigualdades que marginan y obstaculizan el desarrollo del pueblo ecuatoriano.

11. Inclusión Social

El respeto a la diferencia es una actitud social de comprensión de los distintos. Respetar a las personas, implica ser tolerante con las ideas y las posiciones diferentes. Tolerar significa que cada persona acepte y se reconozca en el otro, para asumir el derecho a disentir como forma de convivencia, evitando la discriminación y exclusión. Las mujeres han irrumpido en todos los ámbitos de la vida pública conquistando espacios en la economía y el sistema de decisiones; las etnias emergen para hacer valer su cosmovisión y sus representaciones tradicionales e integrarse al concurso nacional; las personas con capacidades diferentes, las de la tercera edad, los niños, adolescentes y jóvenes, entre otros sectores, al hacer valer sus derechos han mejorado la vida del conjunto de la sociedad y merecen todo el apoyo político de la legislatura.

12 La Educación

Su objeto debe ser dotar a las personas de herramientas para mejorar su calidad de vida, desde una perspectiva de igualdad de oportunidades; implica la incorporación de saberes múltiples, significa aprehenderse, aprender a desaprender y volver a aprender, entender la complejidad de la realidad como un todo interdependiente y no fragmentado; debe ser praxis, reflexión crítica y acción sobre el mundo para transformarlo; la formación de una ciudadanía responsable, informada y comprometida, con capacidades para formarse una opinión propia cimentada y flexible, comprender y aceptar la diversidad social en todas sus facetas, para encontrar nuevas formas de relación entre las personas y con la naturaleza. La educación pública, como principal obligación del estado, debe ser universal, laica y gratuita.

13. Ciencia y Tecnología

Debe ser tarea principal y prioritaria del estado. Ecuador requiere de manera urgente, fortalecer y acrecentar su capacidad científica y tecnológica, dando atención al fomento, a la vocación hacia la ciencia y la tecnología, desde la más tierna edad de la población y como una práctica de vida. En la sociedad del conocimiento la peor forma de dependencia es la que se deriva del atraso tecnológico. Se debe estimular la investigación en el sistema educativo, especialmente en el nivel superior, en la comunidad para que sea innovadora y en todas las instituciones no importa cuales sean sus fines.

14. La Cultura

La política cultural debe ser un eje fundamental para el desarrollo del país y la legislatura debe apoyar intensamente los esfuerzos para preservar y fortalecer el mosaico diverso y plural, rural y urbano, que refuerza nuestras identidades, nuestra autoestima como pueblo y nuestro sentido de pertenencia. La cultura debe aportar al esfuerzo de remontar atavismos y transitar hacia una convivencia libre, respetuosa, ajena al sexismo y discriminación que permita potenciar todas las capacidades creativas de cada integrante de la población ecuatoriana como parte de la civilización mundial.
La legislatura debe comprometerse con el rescate, preservación y promoción todas las manifestaciones artísticas de la nación, así como su integración al crisol universal, respetando la rica pluralidad y diversidad de las manifestaciones estéticas que son parte de nuestra cultura.

15. La Salud

Gozar de salud significa la posibilidad de acceder a un estado de vida que incorpore el bienestar de las personas, el placer y la autodeterminación sobre el propio cuerpo, considerando las especificidades de género y edad. Significa una debida alimentación y calidad de vida, disponibilidad de recursos necesarios para la prevención, así como acceso a una atención digna en los casos de enfermedad, los procesos reproductivos y el lecho de muerte. Es deber prioritario del estado asegurar a todos los ecuatorianos la protección en salud y una atención de calidad y calidez.

16. La Seguridad Social

La seguridad social es un derecho inalienable de toda persona y es parte esencial de la política social del Estado y su responsabilidad fundamental indelegable. Debe superar los conceptos asistencialistas y la voluntariedad y fundamentarse en los principios de equidad, solidaridad, integralidad, subsidiariedad, universalidad y respeto a la diversidad. Las instituciones de seguridad social del Estado no pueden regirse por criterios individualistas, mercantilistas, privatizadores y eficientistas.
El Estado deberá impulsar políticas y acciones tendientes a garantizar a todas las personas un nivel básico de vida de calidad en materia de salud individual y pública, pensiones y jubilaciones, y de fondos compensatorios para grupos vulnerables.

17. Política Internacional

El estado debe defender los principios fundamentales del derecho internacional público, el multilateralismo, la libertad, la justicia y la paz construidas sobre la base del reconocimiento de la dignidad y de los derechos iguales e inalienables de todas las personas. Es imperativo diversificar y acrecentar las relaciones de intercambio y cooperación con el mundo, como mecanismo para asegurar el flujo adecuado de los factores tecnológicos y financieros, así como del conocimiento y la cultura, favoreciendo un desarrollo interno que haga posible ocupar un mejor lugar en la economía global.
Debe existir una participación activa del Ecuador en la vida internacional promoviendo nuevas reglas donde prevalezca la justicia, la corresponsabilidad, el respeto a las diferencias y la equidad, como fundamentos de un nuevo orden internacional; se debe procurar la concertación de un nuevo concepto pragmático de integración andina y sudamericana con mecanismos compensatorios para el financiamiento de los cambios en los factores estructurales de los países de menor desarrollo relativo


Seguridad Nacional

La seguridad nacional, debe concebirse como el conjunto de leyes, políticas, estrategias y acciones tendientes a restaurar y preservar las condiciones políticas, económicas, sociales, naturales, tecnológicas y culturales que garanticen la viabilidad orgánica del Estado y el ejercicio de la soberanía por toda la colectividad, a fin de poder cumplir con los objetivos del desarrollo nacional.
La seguridad nacional implica el respeto a la autodeterminación de los pueblos, a la seguridad de todas las naciones, y una cooperación internacional que garantice la seguridad global. Ello significa que la seguridad nacional no es solamente estatal ni es primariamente militar, ni debe confundirse con defensa o protección; por el contrario, incluye prioritariamente la garantía de los derechos individuales y la promoción del desarrollo económico y social, por lo que es derecho y responsabilidad de los y las ciudadanas.

Alianza

Publicado en Diario El Comercio


Martes, 25 de Agosto de 2009 15:01

Libertad es un nuevo grupo de cinco asambleístasLos asambleístas Paco Moncayo, Marco Murillo, Tomás Zevallos, Rafael Dávila y Edwin Vaca se constituyeron ayer en un grupo legislativo, denominado Alianza Libertad.

Paco Moncayo dijo en rueda de prensa que no quieren ser parte de una Asamblea que reedite los viejos males de los congresos del pasado.

Aseguró que este grupo de asambleístas no pide absolutamente nada ni se conformará como bloque, pues "lo que nos mueve es ser libres en la Asamblea, apoyando todo lo positivo, libres para disentir, oponerse y, sobre todo, para fiscalizar.

Murillo, del Movimiento Amauta, afirmó que se suma a este grupo para decirle al país que no están atados a nada ni a nadie ni a mayorías ni a minorías, sino exclusivamente
sobre puntos de trabajo específico.

Vaca aseguró que este grupo de legisladores apoyará todo lo positivo y rechazará lo negativo para el interés nacional y particularmente para las provincias a las que representan.

También indicó que el discurso de posesión del presidente Rafael Correa no se ajustó a la normativa constitucional que le obligaba a presentar ante la Asamblea los lineamientos fundamentales de las políticas de acción que desarrollará en el ejercicio de su mandato.

Dávila manifestó que el Movimiento Conciencia Ciudadana, de la provincia de Loja, decidió sumarse y actuar con absoluta libertad apoyando tesis positivas y rechazando aquellas que afecten a la sociedad.

http://www.elcomercio.com/

Confianza y Seguridad

Publicado en Diario Hoy

Miercoles, 26 de agosto del 2009

En anterior artículo, se propuso que se estaba configurando un escenario de guerra fría en la región andina. Sin embargo, conviene destacarse que, en la época de la bipolaridad geopolítica y de la guerra fría entre los sistemas marxista leninista y occidental, no se retiraron los embajadores de las dos potencias y, por el contrario, se instaló una línea directa -el teléfono rojo- para evitar el desencadenamiento de una confrontación provocada por errores de comunicación o fallas tecnológicas de los sistemas de alerta temprana, y que, en los peores momentos del conflicto, primó la prudencia y autorregulación por parte de los mandatarios soviético y norteamericano.

En la guerra ecuatoriano-peruana de 1995, los dos Gobiernos tuvieron también la prudencia y el acierto de no retirar sus embajadores, lo cual facilitó el avance de las negociaciones y los acuerdos de Itamaraty y Montevideo que detuvieron las operaciones militares y dieron paso a las negociaciones de la paz.

En Santiago, Chile, se negoció un documento de la mayor importancia: el Acuerdo de Constitución de la Comisión Binacional Ecuatoriano-Peruana sobre medidas de confianza mutua y seguridad, que se firmó posteriormente en Brasilia como parte de los Tratados de Paz. El escenario de confrontaciones que lastimosamente esta viviendo nuestra región, caracterizado por una peligrosa escalada armamentista, por agresivas operaciones psicológicas, por nuevos episodios de desestabilización de Gobiernos elegidos democráticamente, por denuncias dentro de nuestro propio país de conspiraciones desestabilizadoras y de creación de comités populares para defender la revolución ciudadana, hace necesario un sistema y procedimientos de prevención que eviten la escalada de violencia que lamentamos y condenamos. La doctrina universal, para evitar el mal atroz de la guerra y administrar los conflictos en el marco del derecho internacional, es preventiva y es la antípoda de la doctrina de "guerra preventiva" puesta en práctica por el anterior mandatario estadounidense y asumida, aparentemente, por el actual presidente de nuestra entrañablemente hermana nación colombiana. Este tipo de acuerdos no son nuevos en nuestra región y, como consta en el citado documento, tiene antecedentes en las declaraciones emanadas de las Conferencias Regionales de Santiago y San Salvador sobre estas materias.

Encontrándose la novísima Unasur en vísperas de su reunión en de Bariloche, el Gobierno ecuatoriano debería, como una demostración más de su espíritu de paz y concordia y dando cumplimiento a las normas constitucionales vigentes que privilegian la integración andina y latinoamericana, proponer un trato para la firma de un convenio sobre medidas de confianza mutua y seguridad, que sería un aporte a las políticas comunes que en este campo deben asumirse para bien del desarrollo de los pueblos, hoy amenazado por los "vientos de guerra" que estremecen la conciencia de la patria común proclamada por Bolívar.

*Ex alcalde de Quito, invitado de HOY

¿Guerra fría regional? Imprimir Martes, 25 de Agosto de 2009 15:15

Por Paco Moncayo Gallegos*

Impreso en Diario Hoy

Impreso Martes 25 de Agosto, 2009

Después de la Segunda Guerra Mundial, los vencedores se vieron confrontados en lucha por el poder y la hegemonía derivados de intereses geopolíticos y de dos ideologías excluyentes: el capitalismo y el marxismo-leninismo. El mundo entero se dividió en dos áreas de influencia claramente marcadas. Las posiciones tercermundistas o no alineadas no pudieron extraerse de la confrontación bipolar.

La existencia de dos alianzas estratégicas con capacidad nuclear condujo a modificaciones sustanciales en las formas de enfrentamiento. Se desarrolló toda una teoría sobre las guerras de alta, media y baja intensidad en el escenario global de una guerra distinta, calificada como fría, cuyo eje central fueron las operaciones psicológicas. América Latina fue uno de los escenarios de esa "guerra fría" y soportó conflictos internos urbanis y rurales que para la región fueron siempre de alta intensidad. Nuestros países aportaron con el escenario y los muertos, para el logro de los objetivos trazados por los estrategas de las grandes potencias. La primera víctima de la confrontación fue la población que sufrió las terribles consecuencias; otra fue la integración latinoamericana. No se concebía la convivencia en paz entre países con distintos sistemas y, en el interior de los mismos, instituciones fundamentales de la democracia fueron brutalmente demolidas con el pretexto de la lucha de clases o a la defensa de la sacrosanta civilización "cristiana y occidental". La certeza de la destrucción mutua asegurada (MAD, esto es locura, por sus iniciales en el idioma inglés) obligó a aceptar la convivencia pacífica de los dos sistemas. He intentado este recordatorio porque, en la actualidad, se está reeditando en el escenario andino una forma de guerra fría entre países cuyos Gobiernos orientan sus políticas públicas, con fervor misionero, unos en la economía de mercado y el Estado liberal; otros en el difuso socialismo del siglo XXI. Las víctimas son, una vez más, los pueblos de estos países y la incipiente integración andina que ha transitado una dolorosa historia de fracasos. La diferencia está ahora en que la guerra fría sirve a los mandatarios para mantener altos niveles de popularidad, usando como siempre asuntos tan delicados para fines de política interna.

Hay que poner fin a esta actitud demencial. La sociedad civil de los países involucrados, las iglesias, las organizaciones no gubernamentales, las organizaciones gremiales, los gobiernos locales, la población en su conjunto deben llevar a cabo una campaña de sensatez y sosiego a favor de la paz, convivencia pacífica, el respeto a Gobiernos de otra orientación política. ¡Nada de guerras frías ni peor calientes en nuestra América Latina!

*Ex Alcalde de Quito, asambleísta